La alcaldesa Yolanda Osuna Huerta supervisó aquí los trabajos de desazolve de un kilómetro del río Jolochero, los cuales tienen como objetivo reactivar las actividades agrícolas y pecuarias, además de mitigar los riesgos por inundaciones en beneficio de pobladores de por lo menos 10 comunidades de la zona Yokot’an.
En compañía de Luis Antonio Cabrera, director local de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la edil constató los trabajos de remoción de sedimentos en las márgenes del afluente que realiza maquinaria pesada en el punto conocido como Zona Boca de Escoba, en Buenavista 1ª. Sección, y explicó a los pobladores que Centro se transforma al responder positivamente a una petición que tenía poco más de 25 años sin ser atendida.
Junto a residentes, delegadas, delegados y comisariados ejidales de las comunidades beneficiadas de esta zona de Tamulté de las Sabanas, indicó que, ante la problemática, el Gobierno de Centro junto con la Conagua acordaron que la maquinaria empezara a laborar inmediatamente para quitar un “gran tapón” sobre el afluente, el cual impedía el flujo del agua proveniente de laguna Maluco para su desalojo en el río Grijalva.
Esa situación, remarcó, provocaba daños a las actividades agropecuarias e inundaciones en las viviendas ubicadas cerca de las riberas, perjudicando, a su vez, la economía local.
“Hoy estamos haciendo esta acción transformadora, donde se manifiesta que los gobiernos de la Cuarta Transformación avanzan, donde estamos además en la coordinación de los órdenes de gobierno federal, estatal y municipal para trabajar en beneficio de la población de la zona Yokot’an”, dijo.
Aclaró que, la Conagua contempla ejecutar acciones adicionales para tener un adecuado control de las aguas que permitirán a los lugareños retomar sus actividades agrícolas.