Salario mínimo e Infonavit, un calvario para los trabajadores

josé Martínez

Según cifras de la Encuesta de Ocupación y Empleo del INEGI, 437 mil 083 personas sobreviven con el salario mínimo o menos en Tabasco. Esto es una cifra alarmante para la población con que cuenta el estado. Pero además, para empeorar la situación laboral hay 37 mil 111 personas que aunque trabajan no reciben ninguna remuneración. Es grave que, según el CONEVAL, haya más de un millón de personas sumidas en la pobreza. Seguimos padeciendo los rezagos de un sistema que ni miró hacia abajo…hasta que llegó AMLO.

Pareciera que a muy pocos les interesaran tales datos. Hay gente que, a pesar de tener una profesión, sobrevive en peores condiciones como si sus empleos pertenecieran a la informalidad.

Hay quienes trabajan en el sector educativo local que continúa generando recursos como si el outsorcing no hubiera desaparecido; es decir, no cuentan con ningún tipo de prestación económica más allá de su salario neto, y no sólo hablamos de las instituciones educativas privadas, sino también las públicas.

Lo anterior, afecta por supuesto hasta en los créditos otorgados por el Infonavit. Hay funcionarios inconscientes que sólo se dedican a cobrar, que además de entrampar a los derechohabientes en trámites engorrosos, no hacen más que enviarlos a despachos ejecutivos, según denunció el diputado Juan Álvarez.

Sostuvo que el más reciente delegado federal, Jesús Alí de la Torre ahora se encuentra entre quienes quieren ser alcaldes de Centro. El cargo es más importante que el encargo, todo lo contrario de la filosofía en el servicio público que ha impuesto el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y es que el salario mínimo que se ajustará a los pagos en dicha institución. Puede resultar un saldo impagable a pesar de los mandatos presidenciales que beneficien a los trabajadores. El aumento que se aplicará a la clase trabajadora perjudica a quienes no tienen prestaciones aparte de su salario y las hipotecas de los derechohabientes afectados aumentarán drásticamente y éstos correrán el riesgo de que les quiten el patrimonio.

¿Qué sucederá con esta gente que no se atreve a denunciar a los patrones que siguen trabajando bajo las mismas normas del outsorcing con la excusa de que dichas empresas no son lucrativas? ¿Es acaso legal la situación en la que tienen a sus trabajadores y aun así les hacen firmar contratos alevosos en los que quienes necesitan desarrollar sus actividades para sobrevivir no denuncien ante ninguna autoridad tales derechos? ¿Dónde quedan los derechos humanos de esa gente que vive al día, que tiene que cumplir con sus obligaciones fiscales, pero que no puede solventar todos los gastos diarios para su manutención.

HABERES

El gobernador Carlos Merino encabezó un recorrido de supervisión de los avances en los trabajos de rescate de la laguna de Las Ilusiones, obra en la que se invirtieron alrededor de 90 millones de pesos. El mandatario indicó que sí se ha logrado el saneamiento del Vaso Cencali, pero falta concluir el tercer componente, que consiste en la captación de agua del río Carrizal a través de un ducto de 20 pulgadas, que permitirá ingresar el líquido de mucho mejor calidad en dos puntos específicos. Esperemos que los hoteles y residencias aledañas dejen de contaminar.