FELIPA NERY
“Mi mamá fue mi mejor maestra. Me enseñó a tener compasión, a amar y a no tener miedo. Si el amor es dulce como una flor, mi madre es esa dulce flor del amor.” (Stevie Wonder)
México celebra hoy el Día de las Madres, también diversos países del mundo festejan a las madres. Si bien durante muchos siglos las mujeres no fueron reconocidas en sus derechos políticos, como madre sí ha sido reconocida y festejada desde la época de los griegos, que se celebraban a Rhea, madre de los dioses Neptuno, Júpiter y Plutón. Esta mujer dadora de vida ha sido reconocida tanto por sus hijos, como por sus propias parejas que celebran la importante contribución de la mujer a hacerlos padres. Si bien se requiere de un hombre y una mujer para que se pueda reproducir un nuevo ser humano, lo cierto es que durante siglos, la responsabilidad de formar y educar como persona de bien para la sociedad a esa nueva persona, ha recaído en la mujer, porque el hombre se encargaba de ser el proveedor de todas las necesidades de alimentación, vestido y educación. Pero también históricamente muchas mujeres han sido abandonadas junto con sus hijos, por parte de sus parejas, por lo que ellas solas han tenido que enfrentarse a su propia realidad y sacar adelante a sus vástagos, a quienes no dejan caer en el fango de toda la maldad que en la sociedad amenaza a las personas. Seguramente usted como yo, tiene conocimiento de una madre que dedicó toda su vida para ver crecer a sus hijos, trabajando horas extras para proveerles de todas sus necesidades de alimentación, vestido y educación, hasta formarlos como profesionistas. Esas mujeres que han dedicado sus vidas para transformar a sus hijos en personas con capacidades de sobrevivir en la sociedad, no sienten que se hayan sacrificado, por no haber tenido otros disfrutes, porque para ellas, lo más importante eran sus hijos. Desgraciadamente, hoy en día, ya no son todas las mujeres que están dispuestas a dar lo mejor de sí mismas para ponerle alas a sus hijos y hacerlos volar lo más alto que les sea posible. Hay muchas mujeres que son madres y que hoy no serán festejadas como tales, porque no tienen a esos hijos que parieron, y no precisamente porque se los hayan quitado por alguna causa legal, sino porque ellas los han abandonado, porque han preferido vivir sus “libertades” sin la “carga” de un hijo, y los pequeños los han dejado en completo abandono, o con algún familiar y jamás se han vuelto a ocupar, o preocupar por ellos. Estas faltas de compromiso de muchas mujeres con los seres que han traído al mundo, ha provocado que hoy tengamos una sociedad con muchos problemas sociales, especialmente, con aquellos jovencitos y jovencitas que no fueron formados en valores de responsabilidad, estudio y compromiso con el trabajo intenso y por ello, a través de vías que consideran “más fáciles”, quieren tener poder, dinero y placeres, de forma inmediata, sin ningún sacrificio de esfuerzo y trabajo. Por ello, hoy desde este espacio queremos rendir homenaje a todas aquellas mujeres que han hecho de sus hijos, seres humanos capaces de enfrentarse a todas las adversidades que se les presenten, porque desde niños se les fomentaron valores que en su adultez les permite tener las potencialidades que le ayudan a ser personas responsables de todos los actos de su vida, en todos los roles que les toca jugar, como estudiantes, trabajadores, jefes o jefas de familia y con la misma sociedad con la que interactúan. Así es que si tú eres una de esas mujeres que hiciste de tu hijo o hija una persona de bien, nuestro más sincero reconocimiento y felicitaciones, en este día de las Madres, si no ha sido así, que pena, por el daño que le has causado a tu retoño.