¿Qué significa ser padre de familia hoy? Retos y tabúes
Actualmente se espera que los padres se involucren en la vida de sus hijos, más allá de ser la figura de poder y autoridad
AGENCIA
REDACCIÓN
Todo cambio en nuestra vida tiene un significado importante para nosotros. El significado que le damos dependerá de lo drástico del cambio. Uno de los más importantes en la vida de un hombre es cuando tiene que hacerse responsable de otro ser humano; cuando comienza a ser padre. Sin embargo, ¿cuándo comienza uno a ser padre? ¿Qué cambios y qué actitud debe afrontar una persona que comienza a ser padre?
El rol de paternidad ha cambiado mucho a lo largo de los años. Antes, teníamos la imagen cultural de que el buen padre era aquel que era estricto, fuerte y dominante. En pocas palabras, aquel padre que proveía económicamente y que simbolizaba la figura de disciplina y protección.
Hoy en día, la figura del padre ha cambiado drásticamente. No es lo mismo ser padre en este momento que serlo hace algunos años. Actualmente se espera que los padres se involucren en la vida de sus hijos, más allá de ser la figura de poder y autoridad.
En estos tiempos se espera a un padre involucrado en la educación de sus hijos, a un padre emocionalmente estable y disponible para ellos que, además, es accesible y está al pendiente de su alimentación y cuidado. Estamos hablando de una figura paterna que es suficientemente frágil para entender al hijo pero también suficientemente fuerte para poner límites.
Es importante que la persona que se enfrenta a esta situación tenga en mente todo lo que implica ser padre. Cuando nace el niño su primer objeto de amor es la madre, pues es quien cuida de él, lo alimenta, lo educa y le permite sobrevivir. No existe bebé sin madre y viceversa, por lo tanto, dentro de esta relación entre ambos en ocasiones se puede excluir al padre.
Esto provoca que dentro de la fantasía del bebé, no exista nadie más que su madre en esa etapa de la vida del niño. La función paterna consiste principalmente en romper esa díada entre madre e hijo, pues a través de este rompimiento comienza la existencia del padre. Es entonces cuando el bebé ve a este padre como una persona fuerte, con poder y posesión de aquello que más ama: su madre.
En estos momentos el padre necesita ser accesible para el hijo. También necesita ser un padre involucrado, participativo y emocionalmente disponible. En suma, tiene que ser un padre que favorezca la identificación con el niño. Es gracias a estos momentos en los que se permite la relación entre uno y otro que se fortalece la relación entre padre e hijo. En este punto, el padre ya es padre y ha cumplido con esa función paterna tan importante.
Sin embargo, si asumimos el rol del antiguo del dominante e imponente, los niños se formarán una imagen de un padre sumamente autoritario, lo cual obstaculiza de manera muy profunda la identificación y el desarrollo posterior del hijo.
Asimismo, es importante que una persona que será padre pueda tener en mente lo que esto implica. Es común que con todo gran cambio se revivan emociones pasadas. Por ejemplo, algunas personas se asustan cuando se dan cuenta de que se han convertido en esa figura paterna que ellos antes odiaban. Ser padre en la mente de un hombre lo hace dudar y cuestionarse un sinfín de cosas. No obstante, es importante mantener en mente que ser padre es criar a alguien más y que la persona que tenemos enfrente como hijo es un reflejo de nosotros.