AGENCIA
REDACCIÓN
CIUDAD DE MÉXICO.- En México sólo existen doce programas, a nivel federal, que atienden la problemática de la mujer en el país, por lo que las integrantes de este sector en el medio rural e indígena se encuentra fuera del empoderamiento económico y productivo, pues las cifras demuestran que sólo tres de cada 100 son empleadoras, de micro y pequeñas empresas.
Rocío Miranda Pérez, presidenta nacional de la Unidad de la Fuerza Indígena y Campesina (UFIC), señaló que ante esta realidad, es necesario que el Congreso de la Unión, el gobierno federal, así como a los estatales y municipales, trabajen en concretar beneficios para ese sector, el cual reclama de acciones afirmativas y pide que se hagan programas sociales para, desde lo local, lograr el desarrollo nacional en materia de producción de alimentos.
En entrevista sostuvo que como organización campesina se considera urgente la implementación de programas para la producción de alimentos desde las comunidades ya que las mujeres son las que sostienen la soberanía alimentaria en las zonas más marginadas del país.
Se pronunció por que las reglas de operación de los programas destinados a mujeres se revisen y modificarse con la finalidad de asegurar que esté bien en lo económico la población femenina.
Reconoció que los programas más visualizados son el de Oportunidades de la Secretaría de Desarrollo Social; Programa de la Mujer Rural de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano; un nuevo programa de Mujeres Emprendedoras para Mover a México de la Secretaría de Economía.
Con estos, el de la Secretaría de Agricultura que es ex profeso para atender a la mujer rural e impulsar la producción de alimentos básicos sin competir con los hombres propietarios de la tierra.
Consideró que esos programas son insuficiente, ya que mientras no haya políticas públicas para las mujeres más vulnerables que se ubican en este sector así como en las zonas conurbadas más pobres del país, no habrá avances de crecimiento económico y productivo.