FELIPA NERY
“Desconfio de la incomunicabilidad; es la fuente de toda violencia.” (Jean Paul Sartre)
El martes pasado se celebró en el Congreso del Estado, un encuentro por demás aberrante, la comparecencia ante los legisladores, del titular del órgano de fiscalización del Congreso del Estado, José del Carmen López Carrera, evento para el que no sólo no permitieron la presencia de los representantes de los distintos medios de comunicación, sino que fueron capaces de establecer distancias a las que deberían estar alejados los periodistas del lugar donde se realizó la comparecencia y por si fuera poco, colocaron cinta adhesiva a las puertas y todos los espacios por donde se pudiera fugar el audio de lo que se estaba hablando en este encuentro, además, los legisladores y el mismo fiscal entraron por el Congretunel, para evitar ser abordados por la prensa, sólo la diputada Rosalinda López Hernández, se negó a entrar por la puerta trasera y exigió entrar por el frente del recinto legislativo. El argumento de la forma de impedir que los periodistas estuvieran presentes, es porque la ley no permite que se conozca información de la fiscalización que realiza el órgano de la materia, de las cuentas públicas del 2012 tanto del gobierno estatal, como de los municipios y de los órganos autónomos. No puede el Congreso del Estado seguir con esta opacidad y alejado de toda transparencia, cuando los gobiernos democráticos deberían ser totalmente abiertos al escrutinio ciudadano y no argumentar cuestiones de seguridad para no dar la información, el gobierno debe alejar esa idea del secreto gubernamental. Meijer, Curtin y Hillebrandt, indican que la apertura del gobierno es la medida por la que los ciudadanos pueden monitorear e influir los procesos del gobierno a través del acceso a la información gubernamental y el acceso a la arena de la hechura de las decisiones. No puede, ni el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso, Rafael Abner Balboa, ni el titular del Órgano de Fiscalización del Congreso, José del Carmen López Carrera, argumentar secrecía en el manejo de la información de las cuentas, porque no puede existir secrecía en un encuentro donde hay más de dos personas, y en esa comparecencia estaban presentes no sólo 34 legisladores, sino también el oficial mayor del Congreso, personal del área de comunicación del Congreso y otros servidores públicos de este poder, pero además, al final del encuentro los legisladores expresaron su insatisfacción por la información recibida, porque según dijeron, el fiscal no llevaba la documentación que diera respuesta a sus inquietudes, por lo que se comprometió a entregarla con posterioridad. Deberían entender estos servidores públicos, que mientras más se abrieran a la sociedad, dejarían de provocar suspicacias, sospechosismo, la gente no dudaría, ni haría conjeturas de lo que hacen los servidores públicos encerrados y alejados de los ojos y los oídos de los representantes de los medios de comunicación, que son los que acercan la información al pueblo. Esta legislatura se ha caracterizado por la total falta de transparencia en su forma de conducirse y administrar los recursos públicos y no se ve que tengan la intención de cambiar y actuar como demócratas. Bueno, no se les puede pedir peras al olmo.