El editor y escritor mexicano Julio Trujillo llamó a las nuevas generaciones a despojarse de prejuicios; a dejar de pensar en la poesía como cosa de románticos del siglo XVIII, y a que pierdan el miedo por un género que, sostuvo, es “como escuchar música, pues tiene rimas, metáforas y ese poder de transmitir sentimientos a través del ritmo”.
Luego de presentar “El acelerador de partículas”, editado por el sello Almadía, Trujillo explicó que, en él, regresó a temas básicos de la poesía, el amor, las coincidencias, los deberes cotidianos, besos y el caos universal, porque quiso plasmar de una manera metafórica las cosas simples de la vida. Respecto al título del libro, comentó que decidió nombrarlo así debido a una teoría científica que explica.