José Martínez
Definitivamente nuestra vida cambió. La situación por la presencia de contagios de coronavirus vino a darle un giro.
Para la mayoría fue demasiado trágico, ya que perdieron familiares y amigos. Nunca imaginamos cuánto podría crecer este virus, y sobre todo, las desgracias que provocaría.
El pico llegó a lo más alto. Tuvimos que estar en el encierro por un largo tiempo. Se paralizó la economía, la educación a distancia funcionó poco. En sí, el desarrollo del país se detuvo por la emergencia.
Los niños empezaron a tener problemas de comportamiento. Quedarse en casa por mucho tiempo afectó su personalidad…y no pocos adultos.
Lo que parecía una película de hechos aislados en Asia, de repente se presentó en Occidente, y comenzamos a guardar distancia y a usar cubrebocas. No estábamos habituados a tales condiciones, en un principio fue raro para nosotros, hasta que se impuso la necesidad. No faltaron, como siempre, aquellos que no tienen empatía por los semejantes.
Ayer sorprendió que los números de contagios por coronavirus siguen a la baja. Pero lo mejor es que los decesos son mínimos. En estos momentos existe una gran ventaja con las dosis de las vacunas.
En otras partes del mundo sucede lo mismo, al parecer el virus se va degradando. Lo anterior nos ayuda en varios sentidos a empezar una vez más. Creer que existe esperanza para desarrollar una mejor economía en el estado. Enfrentar los miedos que se formaron por este mal que vino para quedarse.
Se habló mucho de las famosas “olas”, y para algunos especialistas México pasó la cuarta en función. Significa que se ha logrado superar en un buen porcentaje la enfermedad, aunque, como bien apuntan las autoridades de la secretaría de Salud, no se debe bajar la guardia ni confiarse, porque entonces volveríamos a estar en peligro.
Todavía vendrán algunas fechas donde se presentarán reuniones fuertes como la Sema Mayor. Las playas y balnearios estarán llenos. La sana distancia se romperá, y es posible que de nuevo haya un repunte de contagios. ¿Entraremos en verdad a una nueva normalidad?
Y los contagios llegarán, quizá no de forma alarmante, pero lo que se busca es que no haya más muertes. Nos tenemos que preparar, estar atentos, listos, porque el coronavirus y sus variantes pueden mutar y crear cepas más fuertes.
Hoy podemos decir que existe una tregua. Pero nada está descartado para volver a los contagios.
HABERES
Sólo dos denuncias por actos de corrupción han recibido el Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) y corresponden al trienio pasado del Ayuntamiento de Centro, destacó la titular del organismo, Laura del Carmen Álvarez Larios. Claro, no es tanto que se hayan erradicado las malas prácticas sino que falta una cultura de la denuncia –no del chisme-, y algo hay que decir del SEA cuyo papel debe ser la máxima publicidad de su existencia y actividades. Construir la confianza para que haya denuncia.