José Martínez
Se acerca el Día Mundial del Libro (23 de abril), y en la entidad ya se preparan algunas actividades para festejar esta jornada.
Sin duda, quien lee tiene esa posibilidad de imaginar, crear y construir un mejor horizonte. De informarse y formarse. Se dice que si lo anterior no sucede es porque hay una mala lectura o un mal texto.
Los psicólogos saben desde hace tiempo que no podemos aprender a leer sin aprender a escuchar. No ser simples oyentes de un diálogo que va y viene sin comprender.
Y respecto a los libros y otros impresos, como instrumentos de lectura, podemos señalar que son parte de nuestra cultura universal. A pesar de que algunos afirmen que pronto desaparecerán, porque incluso se ha escrito literatura sobre esta catastrófica tesis, sin embargo, los impresos viven, y la historia lo ha demostrado.
En nuestro tiempo, no podemos negarlos, con la tecnología se pueden encontrar ejemplares de libros en una red, en una web, pero es tan difícil darles lectura; jamás se podrá comparar esa frialdad con la de tener unas páginas entre las manos, sumado al olor del papel y la textura de una obra publicada.
Con los libros podemos decir que la vida se nos alarga, conocemos tiempos pasados, y podemos viajar a otras latitudes del mundo. Conocer personas, gastronomías, maneras de vestir y nuevos lenguajes. El libro nos ilustra.
Desde hace unos meses, un grupo de mediadores ha realizado la noble tarea de llevar libros a los parques y lugares de Villahermosa. Algunos periódicos impresos han hecho lo propio. Con sus distintas dinámicas y características, cada uno va sembrando ese amor por la lectura. En el caso de los libros, se trata de hombres y mujeres que pertenecen a un programa denominado “Ventana abierta al tiempo”, y que cubren todos los días de la semana en un horario específico.
Es un grupo que mantiene un solo fin, que los ciudadanos se acerquen a los libros, que descubran esa sensibilidad en los poemas, cuentos y novelas; pareciera fácil estar en un parque una hora ofreciendo lecturas, pero no es así, porque se necesita una preparación, además de querer hacerlo, porque nadie puede obligar a un mediador a salir de su casa con libros a cuesta y emprender su prédica. Al contrario, es un gusto ver a los niños descubrir personajes, temas e imaginar lugares.
Los libros son esa luz que nos puede guiar. Los libros representan una escalera para subir sin descanso, por el simple hecho de querer alcanzar la propia meta. Los libros son ciudades, montañas, lluvia, sol, ruido, silencio, es una filosofía, una mirada que extraña un lugar.
HABERES
La directora de Educación Media, Beatriz Rabelo Estrada, señala que a la fecha se han registrado más de 7 mil estudiantes para el Examen Único de ingreso al nivel Medio Superior en la plataforma que está abierta del 08 al 18 de abril. Indicó que el 100 por ciento de los aspirantes serán aceptados por los distintos subsistemas, siendo el Colegio de Bachilleres (COBATAB), el que más demanda tiende. Esta es una etapa fundamental en la formación de jóvenes.