El presidente estadounidense Donald Trump advirtió a Irán, tras los ataques contra tres instalaciones nucleares en Natanz, Isfahán y Fordow, que “o habrá paz o habrá más tragedias; si la paz no llega pronto, hay muchos otros blancos que podemos atacar con precisión”, dijo en un breve mensaje en la Casa Blanca.
El principal diplomático de Irán, Abás Araqchi, advirtió que los ataques estadounidenses “tendrán consecuencias duraderas” y Teherán “se reserva todas las opciones” para tomar represalias. Hossein Shariatmadari, editor jefe del periódico de línea dura Kayhan, una conocida voz conservadora que anteriormente se identificó como el “representante” del líder supremo, el ayatola Ali Khamenei, dijo que “ahora es nuestro turno”.
Un mensaje de Telegram de Kayhan citó a Shariatmadari diciendo: “Sin dudarlo ni demora, como primer paso debemos lanzar ataques con misiles contra la flota naval estadounidense con base en Bahréin y simultáneamente cerrar el Estrecho de Ormuz a los barcos estadounidenses, británicos, alemanes y franceses”.
“Ahora la guerra comenzó”, es el posteo publicado en la cuenta de la red social X asociada a la Guardia Revolucionaria Iraní. Uno de los líderes hutíes de Yemen, Hazam al-Assad, aseguró que “Washington enfrentará las consecuencias”.
La Organización de Energía Atómica de Irán declaró “que a pesar de las conspiraciones de sus enemigos, con los esfuerzos de miles de sus científicos y especialistas no permitirá que se detenga el desarrollo de esa industria”.