José Martínez
El bloqueo de la carretera Villahermosa-Nacajuca por los habitantes de la ranchería Saloya 2ª sección, no debe pasar desapercibido pues su denuncia por contaminación contra la empresa Reind Química (Planta de Tratamiento de Agua Congénitas) tan sólo representa una mínima parte del riesgo de salubridad que afecta no sólo a la tierra sino también al manto freático de éste y otros municipios en la entidad.
Tan sólo en la comunidad se encuentran registradas 14 empresas, de las mil 466 empadronadas por la Secretaría de Bienestar, Sustentabilidad y Cambio Climático (SBSSC) en Tabasco, relacionadas con el tratamiento de residuos químicos considerados peligrosos.
En el caso que nos ocupa, los pobladores denuncian la contaminación de arroyos y tierras de cultivo, que a fin de podría afectar gravemente la salud de los habitantes del lugar.
Es alarmante que en nuestro estado haya una gran cantidad de empresas de este tipo ya que debido a la geografía en la que predomina la presencia de cuerpos lagunares, arroyos, pantanos y popales es proclive a contaminarse con más rapidez en perjuicio de la población rural y urbana. Habrá que realizar una supervisión muy seria a quienes manejan residuos tóxicos para evitar mayores daños al ecosistema local, como el causado por esta planta de aguas congénitas en Saloya 2ª.
La SBSSC también tiene registros de 331 empresas que aparecen como prestadores de servicios y que manejan residuos. Y que operen sin control.
Sería indispensable que las autoridades presentaran un estudio de impacto ambiental que este tipo de actividades pueden causar en el estado, señalando los riesgos que se corren en el manejo de los residuos de origen industrial y agroindustrial, de tiendas de autoservicios y departamentales, hoteles y otros establecimientos generadores de contaminantes.
Esta situación a escalas mayores es tan seria como el mismo tratamiento de los residuos domésticos en la que no estamos tomando en cuenta la separación de orgánicos e inorgánicos para su tratamiento adecuado, así como la contaminación de los ríos u otro tipo de manto acuático donde a todas luces se observa el vertido de aguas negras y que causa un gran deterioro a la vida silvestre de los alrededores y que también afecta la calidad de vida de los ciudadanos.
Es grave que muchas veces las autorizaciones y vigilancia de este tipo de empresas, como las de venta de alcohol y otras parecidas, sean toleradas por acuerdos simulados pero marcados por la corrupción, que es otro tipo de contaminación.
HABERES
La Secretaría de Bienestar, Sustentabilidad y Cambio Climático (SBSSC) mantiene a mil 446 empresas en el padrón de “generadores de residuos de manejo especial”.
Se trata de aquellos desechos que surgen de los “procesos productivos, que no reúnen las características para ser considerados como peligrosos o como residuos de sólidos urbanos, o que son producidos por grandes generadores de residuos sólidos urbanos”.
