Leer para vivir no es una mera frase de ocasión, es una posibilidad real que se confirmó a partir de la experiencia de quienes ya tienen en la lectura una práctica de vida, y por suerte, participaron en el “Encuentro con Mediadores de Lectura” donde lo expresaron, como el niño tímido de la Sala de lectura “Jaguar sobre ruedas” quien comentó que gracias a la lectura superó sus problemas de lenguaje, o los testimonios de las personas recluidas que llegaron hasta los oídos del público gracias al escritor que coordina una sala de lectura en el CRESET. Esta fue la segunda edición de “Leer para vivir Encuentro con Mediadores de Lectura” convocado por el Sistema Informativo Tabasco que aglutina los diarios Presente, Avance, El Sol del Sureste, y el Hotel Viva Villahermosa, con motivo de la celebración del Día Nacional del libro y los Lectores.
DIVERSIDAD Y COMPROMISO
Al encuentro asistieron promotores de diversos estilos y calibres. Los niños integrantes de la Sala de Lectura “Jaguar sobre ruedas”, coordinada por el periodista y mediador de lectura Wilber Albert; el escritor y mediador cultural Antonio Solís Calvillo; la escritora y maestra de lengua yokotán Alejandrina Hernández Gerónimo; el escritor y presidente de la agrupación “Querer leer”, Gamaliel Sánchez; el abogado, escritor y mediador de lectura en el Centro de Reinserción Social del Estado de Tabasco (CRESET), Luis Arturo Gámez, todos moderados por el catedrático y articulista tabasqueño Mario Cerino Madrigal.
Los libros son la bisagra del binomio que forman el escritor y el lector, expresó en la bienvenida el periodista y director del SIT, Víctor Sámano Labastida, a los ponentes y público. Pero –destacó- los lectores son algo más poderoso: los lectores pueden derribar las murallas de la ignorancia, sin ellos no sobrevive la palabra impresa ya sea puesta en revista, periódico o libro, de ahí la importancia de sumarnos en la promoción de la lectura para el desarrollo social.
Al final, tanto los participantes como el público que asistió a la reunión realizada el pasado viernes por la noche en el lobby del Hotel Viva Villahermosa, que amablemente acogió el encuentro, todos coincidieron desde sus diversas perspectivas en que leer sirve para vivir, para la libertad, parar la dignidad y la esperanza. Que un libro o quinientos son microcosmo provechoso para la imaginación.
PARA EL PRESENTE Y FUTURO
Los primeros en compartir fueron los niños de la Sala de Lectura Jaguar sobre ruedas: Emmanuel Córdova López, Gibrán Albert de la Cruz, Zoe Villegas López, Melissa Córdova López y Gabriel Sánchez Córdova. El grupo de niños con una edad entre los ocho y once años se reúne todos los sábados y es uno de los mejores ejemplos en Tabasco pues además de sus actividades de lectura, recibe la visita de personalidades de la cultura y comparte su experiencia con otros niños de las comunidades humildes de las afueras de la ciudad.
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