Croacia derrotó este jueves a Argentina por un contundente y determinante 3-0 en un duelo en el que Modric, Rebic, Rakitic y sobre todo Willy Caballero fueron los protagonistas.
En los 90 minutos, Lionel Messi no pudo destacar, fue perseguido, desarmado y apenado ante toda una afición que esperó que él sólo cargara con el equipo nacional en un compromiso en el que ninguno de los argentinos pudo operar con comodidad por la fortaleza que presentaron los croatas.
El encuentro comenzó con emociones, tal y como se pronosticaba, siendo la primera oportunidad para los croatas, que en un ataque de Perisic causó peligro disparando por el pasto motivando a Caballero a exigirse a fondo.
Minutos más tarde la maquinaría europea volvió al ataque con Rakitic, quien estuvo fino a la ofensivo y puntual a la defensiva, manteniéndose cerca de Messi, quien hizo poco y nada en el segundo partido de la Albiceleste en el Mundial.
Al 21’, Acuña centró por la derecha pasando el balón apenas rozando el horizontal, tiro que hizo levantar los gritos en los graderíos de Nizhki Novgordo.
Ocho minutos después los croatas tuvieron una desatención en el área, dejando el balón con Enzo Pérez, quien se supo pleno frente al marco, pero su desesperación hizo lanzar el balón por un lado en la que tal vez fue la jugada más clara de los sudamericanos.
El primer tiempo presentó emociones, pero además una Argentina que no supo contener a los croatas que jugaron duro para ablandar al enemigo.
En el segundo tiempo Argentina sabía que venían 45 minutos de drama en lo que era a matar o morir, pero en la operación simplemente no pudieron entregando un gol al 53’, cuando Caballero despejó demasiado corto, dando el esférico a Rebic quien midió y disparó de derecha un cañonazo que puso el 1-0.
Croacia tomó aún más confianza y en el rostro de los argentinos y de Sampaoli había angustia, pues lo habían intentado todo. Al 79, Modric recibió un balón fuera del área, recortó en dos ocasiones para acomodarse a su perfil derecho siempre bajo el consentimiento de una zaga que no evitó el disparo que salió potente para que Caballero se comiera el segundo del juego.
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