La marcha por las instituciones o contra López Obrador

José Martínez

La famosa “marcha por la democracia”, porque así le llamaron los adversarios de Andrés Manuel López Obrador, a la manifestación, puede ser vista desde diversos ángulos. Uno de ellos es sin duda que es promovida por una cúpula sin poder, que busca el regreso de los privilegios. Tampoco hay que ignorar la participación de ciudadanos de buena fe, pero el objetivo es partidista.

Ayer fue el llamado, sin embargo, de acuerdo con los medios, éstos informaron que los asistentes se quedaron sólo en el Zócalo.

A pesar de que en la convocatoria circulada en redes sociales, se insistió en que es un acto apartidista, arribaron los dirigentes nacionales del PAN, Marko Cortés, y del PRD, Jesús Zambrano.

Por otro lado, repartieron pancartas bajo la consigna de que el “autoritarismo levanta muros”.

Hoy así lo ven, así lo sienten, porque se ven sin ese poder del que vivieron por mucho tiempo, cuando Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, gobernaron el país. Para no ir más atrás.

En esos sexenios compraron, vendieron y derrocharon lo que quisieron, y a su vez compartieron esos momentos con otras familias, las mismas que hoy se recienten por estar alejados de Palacio Nacional.

Y sucedió lo mismo con ciertos medios de comunicación de corte nacional, quienes gozaron de publicidad y pautas millonarias, incluyendo las revistas como Nexos y Letras Libres, por mencionar algunas.

Un hecho que se vivió ayer, y que al fin se pudo ver con más claridad, fueron las acusaciones que siempre señaló AMLO en contra de Lorenzo Córdova, hoy fuera del INE, y que curiosamente estuvo como orador oficial del evento.

Entonces, de alguna manera se le da la razón el paisano de que Córdova estuvo de lado de los priistas y panistas. Al principio, si lo recordamos, nadie lo creía; pero al pasar el tiempo o AMLO tenía razón o cayeron en el juego: tres partidos que se decían diferentes uno de otro ahora están en el mismo barco.

HABERES

Ayer Claudia Sheinbaum Pardo acudió al Instituto Nacional Electoral para realizar su registro como candidata única a la presidencia de México. En evento fue arropada por cientos de morenistas, y algunos que se vistieron de guinda de última hora. En la ceremonia, Mario Delgado insistió que enfrente solo se tiene a una candidata que salió del resentimiento. Y de este lado, con Claudia, sostuvo, se tiene a una mujer que seguirá con el movimiento transformador, cuyas bases implantó López Obrador. En su momento Sheinbaum Pardo indicó que existe un cambio verdadero, y es el inicio del renacimiento de México, porque se demostró que hay un modelo distinto al neoliberal, con el impulso de la economía desde abajo. Se ha generado paz social, inversión privada, fortaleza del peso, y el mejoramiento de la economía de la gente, y nos ha devuelto el orgullo de ser mexicanos. Seguir con la transformación es un compromiso con todos, un país con prosperidad compartida, respetuoso de los derechos humanos, y con democracia plena. El próximo uno de marzo presentará los puntos del programa de gobierno, adelantó, como se espera que lo hagan Xóchitl Gálvez (PAN, PRD, PRI). Y Máynez (MC).