var _gaq = _gaq || []; _gaq.push(['_setAccount', 'UA-38838256-1']); _gaq.push(['_trackPageview']); (function() { var ga = document.createElement('script'); ga.type = 'text/javascript'; ga.async = true; ga.src = ('https:' == document.location.protocol ? 'https://ssl' : 'http://www') + '.google-analytics.com/ga.js'; var s = document.getElementsByTagName('script')[0]; s.parentNode.insertBefore(ga, s); })();

La violencia no ex exclusiva de una región: índice de paz global

Por: José Martínez

La paz en México se ha estancado, de acuerdo a un indicador aplicado en 164 países en el mundo, en el cual nuestro país ocupa el lugar 144. Así lo afirmó Patricia de Obeso, directora del Instituto de Economía y Paz (IEP). De acuerdo al índice de Paz Global (GPI por sus siglas en inglés), nuestro país se encuentra a 45 posiciones atrás de Estados Unidos, a pesar de la violencia entre su población civil debido a la disponibilidad de armas. Aquel país, primer consumidor de drogas en el mundo, ocupa el lugar 99. Podríamos decir que el Imperio del Norte lleva la guerra a otras latitudes.

Pero quedémonos con los registros que nos importan. En este tenor, se miden los índices de paz en México desde los más hasta los menos pacíficos, donde Hidalgo es el número uno con menos violencia, y Guerrero es el que más incidencia de actos violentos registra en los 32 estados.

En la clasificación, Tabasco ocupa el lugar número 12. Se estiman mil 480 detenciones sin sentencia, según este método de medición de índice de la Paz en México.

Esto nos muestra otra perspectiva de lo que ocurre en el país, ya que según las cifras de medición presentadas por el IEP y la GPI el Estado de Puebla ocupa el lugar número 11 con 2.341 puntos en el índice de violencia y Tabasco 2.259 respectivamente. Los dos extremos, Hidalgo con 1.758 y Guerrero con 3.859 puntos de calificación. En estos marcadores que van en orden ascendente se toma en cuenta el número de casos de homicidio, delitos con violencia, delitos cometidos con arma de fuego, presos sin condena, financiamientos de las fuerzas policiales, crímenes de la delincuencia organizada y eficiencia del sistema judicial.

Si nos remitimos a las cifras y a los rubros tomados en cuenta desde la óptica de 162 países y dentro de ello la posición que ocupa Tabasco en el cuadro nacional, habría que ver cuáles son las intenciones de quienes sólo difunden datos aislados, refiriéndose a los actos de violencia en esta región, además de que Villahermosa se encuentra a cinco posiciones menos del Distrito Federal, donde el índice de violencia es mayor con 2.529.

No obstante, existe una amplia variación en los niveles de paz entre los estados que conforman la República Mexicana y sus indicadores, como puntualmente lo afirma el estudio realizado por la GPI. Un dato abrumador es el comparativo que indica que en México hay 14 homicidios por cada 100 mil habitantes, cuando en otros países es de 6 por la misma cantidad de ciudadanos.

Los altos costos que el gobierno federal invierte en su combate al crimen organizado debería ser destinado en terminar con la corrupción, en mejorar la participación ciudadana para aumentar la confianza de la gente en el Gobierno y sus autoridades, declara de manera irónica la ex directora de Desarrollo Ciudadano en el Concejo Cívico de Nuevo León.

Es una verdadera pena que la inseguridad pública se politice y que algunos sólo hagan énfasis de lo que ocurre en Tabasco como si nuestro Estado tan sólo fuera una pequeña isla donde sucede de todo, y no miran hacia el resto del país. En el comparativo nacional, a detalle, no estamos mal, aunque por supuesto no hay que bajar la guardia.

HABERES

ALGUIEN debe decirle a los delegados federales en Tabasco que dejen de estar soñando con alguna candidatura y que se pongan a trabajar. Si no le rinden buenos resultados a Peña Nieto y a los tabasqueños, se pueden ir olvidando de cualquier de las fantasías.