José Martínez
El pasado 28 de diciembre el gobierno federal inició un programa de acción contra del robo de hidrocarburo en instalaciones de Pemex.
Con su plan conjunto, en donde participan 15 dependencias federales, la administración plantea desmantelar una de las caras que tiene la corrupción institucionalizada dentro de la empresa más importante de México, y que cada año incrementaba su impacto al erario.
El robo de hidrocarburos llegó a generar a la petrolera mexicana pérdidas por el orden de los 66 mil millones de pesos tan solo el año pasado.
Las dimensiones del asunto no están totalmente definidas. Hoy sabemos que dentro de la empresa productiva del estado se había creado otra empresa paralela para la comercialización del hidrocarburo robado.
Si bien las tomas clandestinas en ductos se incrementaron considerablemente del año 2000 al 2018, éstas solo representaron el 20 por ciento de las pérdidas. El resto, el otro 80 por ciento, se extraía directamente de las instalaciones petroleras en todo el país, en tierra y mar.
Esta semana se dio uno de los mayores ejemplos del robo de combustible en mar. Ocurrió en el puerto de Dos Bocas, donde oficiales de la PGR y elementos de la Marina aseguraron en altamar dos buques con 880 mil litros de diésel. Hay diez personas detenidas por este acto.
Los buques asegurados son embarcaciones particulares que aplicaban el “dos por uno”, es decir, pagan una factura y clonan otra con la misma cantidad para extraer una doble carga.
Esto ya lo había anunciado el presidente de México hace unas semanas. El robo de hidrocarburo también ocurría en altamar, bajo la lógica de pagar una cantidad y surtírsele el doble. Citó al puerto de Dos Bocas como ejemplo. Ayer se confirmó.
Al ser la zona de Dos Bocas donde se construirá la próxima refiera de México se busca sea un lugar seguro. No estaremos trabajando para el beneficio de los de siempre se ha dicho.
A un mes de haberse iniciado el combate al robo de hidrocarburo, la resistencia de quienes se benefician de esta actividad ilegal es grande.
El actual director de Pemex, Octavio Romero Oropeza, señaló hace unos días frente a diputados federales que si bien el robo de combustible se ha reducido ésta continúa en números preocupantes. Las acciones seguirán de forma permanente hasta recuperar completamente a la empresa mexicana.
La situación en mar es más compleja. Si bien por un lado Pemex ha denunciado el robo constante de equipos, algunos de grandes dimensiones, esto no era entendible ante los equipos de vigilancia que se tiene en el Golfo en la que hasta una pelota flotando en las aguas marinas podía ser detectada de forma inmediata. Todo apunta a las complicidades dentro de la misma empresa mexicana.
El combate al robo de hidrocarburo apenas empieza. Algunas personas no han querido entender que el robo a la nación ya no será solapado. Se les está dando todas las facilidades a quienes por necesidad se hayan enrolado en esa actividad ilícita para que la abandonen. Pero llegará el tiempo de la cero tolerancia.
HABERES
El gobierno del estado anunció que el nuevo Centro de Convenciones empezaría a construirse a finales del año 2019 en el terreno que alberga a la Nave 3 del Parque Tabasco. Adán Augusto López adelantó que será una infraestructura moderna, con la que se responderá a las expectativas de los ciudadanos y de los promotores de eventos nacionales. Tabasco requieren de un Centro de Convenciones a la altura de la competencia actual por los mercados. Y también de empresarios que inviertan.
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